Es muy común, que el miedo respecto a la enfermedad impacte en los padres, especialmente porque en niños pequeños o pre adolescentes no se tiene la conciencia suficiente para realizar los controles que requiere la enfermedad.
Ir a la escuela, dormir en la casa de un amigo, salir de campamento o simplemente a pasar el día en otro lugar lejos del seno familiar, implican situaciones de preocupación en los mayores, siendo el principal temor que el niño realice un pico de hipoglucemia. Pero es importante saber que con una planificación y un control adecuado, el niño puede tener un viaje placentero y saludable.
Consejos para atravesar estas etapas
1. Planificar previamente las salidas
Hacer chequeo médico previo a un viaje prolongado.
Además, asegurarse de:
- Solicitar recetas escritas para insulina y medicamentos
- Reemplazar los suministros de viaje en caso de pérdida o rotura
- Pedir una carta al médico describiendo todo lo necesario para el tratamiento, incluso dispositivos médicos
2. Enseñar qué hacer durante el viaje al adulto acompañante
- Medir la glucemia
- Contar carbohidratos o seguir el plan de alimentación
- Medir y administrar insulina
- Brindar tratamiento cuando la glucosa esta muy alta o baja
- Responder a una emergencia, especialmente cuando se requiere glucagón
3. Actividad física constante
El ejercicio contribuye a controla la glucosa, siendo beneficioso para el corazón, los músculos, el estado de ánimo, el peso, la confianza del niño, entre otros.
Se trate de un deporte grupal, individual o una aventura al aire libre, la planificación es clave. Es posible que le nivel de glucosa descienda durante o después del ejercicio, por lo que preciso esta atento y medirla con frecuencia.
4. Evitar picos de hipoglucemia
Ante los siguientes síntomas o manifestaciones de baja glucosa en el niño, es recomendable darle de comer o beber algo con 15 gramos de carbohidratos:
- Mal humor
- Conducta inusual
- Sudor excesivo
- Temblor
- Dolor de cabeza
- Hambre
- Falta de coordinación
¡Importante!
Acciones para prevenir los bajos niveles de glucosa:
- Suministrar la dosis correcta de medicamentos para la diabetes
- Evitar incrementar la dosis, salvo indicación profesional
- Acostumbrar al niño a no omitir o pasar por alto comida después de aplicarse insulina
- Anotar en un cuaderno el nivel de glucosa en sangre
- Informar a personas del entorno sobre la enfermedad y como proceder