No es fácil hablar de este tema con claridad y sencillez con nuestros hijos e hijas.
Cuando nos referimos a “educación sexual integral”, no sólo nos referimos a hablar sobre “relaciones sexuales”, sino que es mucho más que eso; es aprender a expresar emociones y sentimientos, a reconocer y respetar valores como la amistad, el amor, la solidaridad, la intimidad, a cuidarnos y a cuidar a los demás.
Educación sexual es enseñar a proteger los derechos sexuales y reproductivos de las personas.
La sexualidad no empieza en la adolescencia
Alrededor de los 3-4 años los niños y niñas sienten curiosidad por su cuerpo, se prestan más atención y es posible que toquen sus genitales. Esto es natural y propio de la edad. No tenemos que retarlos ni castigarlos, porque pensarán que sus genitales son algo feo o inapropiado, sino que debemos explicarles que no es malo tocarse pero deben hacerlo cuando estén solos, no delante de los demás.
También se dan cuenta de las diferencias entre varones y mujeres, entonces comienzan a preguntar. Es necesario que conversemos con naturalidad sobre el tema y cuando pregunten, explicarles que niños y niñas tienen diferencias corporales, que nuestro cuerpo va cambiando a medida que crecemos y que cada uno crece a su ritmo. Hablemos sin tener vergüenza del pene, el escroto, la vulva y la vagina. Es importante hablar sobre respetar su propia intimidad y la de los demás. Podemos explicarles que las partes del cuerpo cubiertas, con ropa interior y malla, son partes íntimas y que solo ellos pueden ver y tocar.
A partir de los 4 años los niños empiezan a sentir pudor o vergüenza y empiezan a ir al baño y vestirse solos, por lo que es fundamental brindarles esos espacios para darles independencia y que aprendan a respetar la intimidad.
Cuánto más sepan, mejor…
La información buena, oportuna y clara es la mejor herramienta para llevar adelante temas que nos preocupan como padres y profesionales de la salud. Informarlos es protegerlos, es enseñarles a cuidarse y cuidar a los demás. Cuanta más información tenga un niño sobre sexualidad, relaciones afectivas y respeto, más protegido estará de abusos y de relaciones de violencia y más placenteramente vivirá sus relaciones cuando sea mayor.
Algunos de los temas a tratar son: cambios en la adolescencia, relaciones sexuales, embarazo adolescente, anticonceptivos, infecciones de trasmisión sexual.
Al momento de una charla con nuestros hijos e hijas, lo más importante es:
- Demostrar afecto
- Crear un clima de confianza
- Tener buena disposición
- Estar atentos y comprenderlos
- Escuchar bien lo que preguntan, para saber hasta dónde necesitan saber y no confundirlos con cuestiones que todavía no les interesan o no pueden entender
- Hablarles con claridad y siempre responder lo que quieren saber
Otros consejos:
- No obligar a los niños a que demuestren afecto si ellos no lo desean
- Fomentar la igualdad entre niños y niñas, en los juguetes y juegos, sin encasillarlos en roles de género que pueden llevar a situaciones injustas y desiguales
- Dejar que cada niño se exprese como se sienta o quiera
- Enseñarles que ante cualquier situación sepan pedir ayuda a un adulto de confianza
- Explicarles que no deben guardar secretos que los hacen sentir mal
- Enseñarles que no deben permitir malos tratos
- Aprovechar los momentos para dar información sin forzar el tema y sin hacer interrogatorios