¿Qué es?
la esclerodermia es una enfermedad que consiste en la acumulación de tejido similar al cicatricial en la piel y en otras partes del cuerpo. También daña las células que recubren las paredes de las arterias pequeñas.
Existen 2 tipos de esclerodermia: localizada, afecta solo la piel y sistémica que afecta los vasos sanguíneos y los órganos internos, además de la piel.
La esclerodermia es una enfermedad autoinmune donde el sistema cheap nfl jerseys inmunitario ataca por error y destruye el tejido saludable del organismo. Afecta en general a personas de 30 a 50 años y es mas frecuente en mujeres.
Síntomas
La esclerodermia localizada afecta solo la piel de las manos y cara. Se desarrolla lentamente y en pocas ocasiones se propaga en el resto del cuerpo.
La esclerodermia o esclerosis sistémica puede afectar grandes zonas de la piel y órganos como el corazón, pulmón y riñones. Existen dos tipos principales: enfermedad limitada (Síndrome de CREST) y enfermedad difusa.
Síntomas cutáneos:
- Síndrome de Raynaud: los dedos de las manos y los pies se tornan azulados o blancos en respuesta al frío
- Rigidez y tensión en la piel de cara, manos y antebrazos
- Pérdida de cabello
- Piel facial tensa y con aspecto de máscara
Síntomas musculares:
- Dolor articular
- Rigidez e inflamación de los dedos
- Atrofia muscular en manos
Síntomas digestivos:
- Dificultad para tragar
- reflujo gastroesofágico
- Estreñimiento
- Diarrea
Síntomas respiratorios:
- Dificultad para respirar
- Tos seca
- Sibilancias
Diagnóstico
El médico debe estar alerta ante la aparición de tres signos de alarma: fenómeno de Raynaud, edemas en dedos de manos y ANAS (anticuerpos) positivos.
Ante la aparición de uno o varios de estos signos se debe derivar al reumatólogo que realizará pruebas diagnósticas. Entre ellas le solicitarán análisis de sangre, radiografía de tórax, electrocardiograma, pruebas de la función pulmonar y biopsia de piel para ayudara a identificar la enfermedad.
Tratamiento
No existe una cura para la esclerodermia. La esclerodermia localizada, a veces, desaparece por sí sola. El tratamiento, por lo general, se concentra en aliviar los síntomas y prevenir daños adicionales a la piel y a los órganos.